Sentencian al que asesinó y prendió fuego a un septuagenario en #Aguascalientes

Aguascalientes.- Agotadas todas las líneas de investigación, finalmente llegó a término el proceso en contra de Francisco Ramón Hernández Rodríguez de 28 años de edad, responsable del delito de Homicidio Doloso Calificado con Ventaja y Traición en agravio de Juan alias “El Gavilán” quien contaba con 71 años; derivado de los lamentables hechos ocurridos en el mes de julio de 2015, el Juzgado Segundo Penal dictó sentencia condenatoria de 21 años y 3 meses de prisión, así como al pago total de la reparación del daño material y moral de $698,400.00 pesos.

Conforme a la averiguación previa integrada por el Agente del Ministerio Público en coordinación con los Policías Ministeriales y Peritos, quedó acreditado que el día 09 de julio del año 2015, aproximadamente a las 19:00 horas, Francisco Ramón estuvo ingiriendo bebidas embriagantes con “El Gavilán” en su domicilio ubicado en el Ejido Cotorinas y en determinado momento comenzaron a discutir, así como forcejear por un motivo ajeno a la convivencia.

Por lo anterior, el hoy occiso se dirigió a su recámara donde agarró un arma de fuego tipo revolver en color negro, la cual tenía guardada debajo de su almohada; ante la acción, Francisco Ramón lo golpeó con un palo de madera que estaba recargado en la puerta, posteriormente, le quito la pistola, colocándosela en su costado derecho, disparándole entre la nuca y el oído del mismo lado, todo esto a una distancia aproximada de 30 centímetros.

Posteriormente, el sentenciado sacó el cuerpo de la habitación hasta la parte posterior de la vivienda, donde lo roció con gasolina y le prendió fuego, huyendo del lugar inmediatamente; fue el hijo del hoy finado quien descubrió el macabro hallazgo y al momento de ser entrevistado por los Agentes Ministeriales, indicó que días antes de los lamentables hechos, trató de contactar a su padre y al no tener respuesta se dirigió a la vivienda.

Sin embargo, la puerta de acceso se encontraba cerrada por lo que tuvo que brincar la barda y al ingresar, descubrió que sobre el suelo estaba el cuerpo de una persona calcinada, la cual identificó como su padre, por lo que volvió a salir de la vivienda para reportar lo sucedido a las autoridades.

Del mismo modo, el hijo del finado aseguró que al revisar la casa de su padre descubrió que faltaba una pistola tipo revolver,  que sabía su padre tenía para su seguridad, así como una tarjeta de débito de una sucursal bancaria y su teléfono celular.

Gracias a los trabajos de investigación por parte de la Policía Ministerial, se descubrió que se habían realizado algunas compras con la tarjeta del hoy fiando, en una farmacia y en una tienda de ropa tipo vaquera, por lo que se dirigieron a dichas negociaciones proporcionando los empleados de mostrador los baucher firmados, así como proporcionar algunos de los videos de seguridad de dichas empresa, descubriendo que quien aparecía en las imágenes, era una persona de nombre Francisco Ramón Hernández Rodríguez quien tenía su domicilio en la misma comunidad.

Con esta información, los investigadores solicitaron al Agente del Ministerio Público AMP una orden de localización y presentación, la cual fue otorgada por el representante de la ley; inmediatamente un grupo de agentes investigadores se dirigieron al domicilio del presunto responsable, observaron que caminaba por el lugar una persona de sexo masculino, que coincidía con las características del solicitado en el documento oficial, por lo que  detuvieron su marcha los agentes, quienes posterior a su identificación, le pidieron que hiciera lo propio, manifestando llamarse Francisco Ramón Hernández Rodríguez, por lo que le solicitaron que los acompañara al entonces edificio de Averiguaciones Previas, toda vez que estaba señalado como el probable homicida de Juan alias “El Gavilán”.

Ya a disposición del AMP, Francisco Ramón, fue cuestionado con relación a las compras realizadas con la tarjeta del occiso, comenzando a caer en contradicciones, argumentando primeramente que se la había encontrado y luego indicó que el occiso se la había prestado, hasta que terminó por confesar que él lo había ultimado.

Finalmente, al transcurrir el procesos penal, el Juzgado Segundo Penal dictó la sentencia condenatoria en contra de Francisco Ramón por el delito de Homicidio Doloso Calificado con Ventaja y Traición, por lo que deberá cumplir su condena en el Centro de Readaptación Social de El Llano.